Debido a la ausencia de indicadores predectivos en el mercado, se ve con gran dificultad la recuperación para el segundo trimestre del año 2023. La falta de pedidos por parte de los paises como USA, Canada y la Unión Europea, ha obligado a la gran mayoria de fabricas en Asia a reducir las producciones de materias primas, lo cual genera retraso en las actividades cuando el reputente anticipado llegue en el tercer trimestre del año.
El gran beneficio que se ha logrado con la caída de actividad en el mercado, es una recuperación del casi 100% de la congestión portuaria, la entrega de nueva capacidad de buques combinada con la falta de demanda impondrá una presión a la baja sobre las tarifas de flete durante la mayor parte de 2023. Debido a las condiciones actuales del mercado, es probable que la volatilidad de las tasas a corto plazo aumente durante la primavera y los primeros meses del verano. El temor a un mercado persistente a corto plazo generalmente ayuda a acelerar las firmas de contratos anuales, ya que los cargadores intentan evitar el envío a tarifas a corto plazo más altas que las que se ofrecen en los contratos actuales.
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